En verano es fundamental prestar atención a la hidratación de nuestros gatos. Y es que nuestros pequeños felinos, descendientes de animales desérticos, tienen un instinto de sed menos desarrollado que otros animales. Esto significa que muchas veces no beben lo suficiente, lo que puede aumentar el riesgo de deshidratación, problemas urinarios e incluso cálculos renales. Por eso, hoy queremos compartir contigo algunos trucos sencillos para que tu gato beba más agua en esta época del año. ¡Vamos a cuidarlos como se merecen!
Tips para que los gatos beban más
Coloca varios bebederos en casa. Los gatos prefieren tener varias fuentes de agua a su disposición. Coloca bebederos en diferentes estancias y, muy importante, lejos del arenero y del comedero para evitar que se mezclen olores que les resulten desagradables.
Usa fuentes de agua. A muchos gatos les encanta el agua en movimiento. Las fuentes automáticas mantienen el agua fresca y en circulación, despertando su curiosidad y fomentando que beban. Además, suelen incluir filtros que mejoran la calidad del agua y eliminan impurezas.
Apuesta por el agua fresca y limpia. Cambia el agua al menos dos veces al día y utiliza recipientes de acero inoxidable, cerámica o cristal. Estos materiales conservan mejor la frescura y no alteran el sabor, a diferencia del plástico, que puede dar un gusto extraño con el tiempo.
Añade sabor al agua. Un truco útil es añadir unas gotas de caldo de pollo o pescado (sin sal ni condimentos) al agua. El aroma y el sabor atraerán a tu gato y lo animarán a beber más. Recuerda cambiarla a diario para evitar que se estropee.

Hidrata también a través de la comida. Ofrecer comida húmeda para gatos, como latas o sobres, es una excelente manera de aumentar la ingesta de líquidos. Incluso puedes añadir un poco de agua tibia para potenciar el aroma. Otra opción es preparar recetas caseras supervisadas por tu veterinario.
Controla la cantidad que bebe. En verano, un gato adulto debería ingerir entre 50 y 100 ml de agua por kilo de peso al día, contando tanto el agua que bebe como la que obtiene de la comida. Si notas que tu gato bebe mucho menos, es momento de poner en práctica estos trucos y, si la situación persiste, consultar con el veterinario.
Observa signos de deshidratación. Si tu gato presenta encías secas, apatía, pérdida de apetito o piel menos elástica, podría estar deshidratado. Ante cualquier duda, acude al veterinario cuanto antes.
Esperamos que estas recomendaciones te hayan resultado de utilidad. Ya sabes que puedes acceder a muchos consejos sobre mascotas más en el Blog de Chuchupets o en nuestra cuenta de Instagram. ¡Hasta pronto!