Aunque nos neguemos a creer que el verano está llegando a su fin, las lluvias de estos días y la bajada de la temperatura nos devuelven un poco a la realidad. De hecho, en Madrid, de donde somos, estamos viviendo los días más lluviosos de este año y eso nos ha llevado a pensar en cómo afecta la lluvia a nuestros perretes. Dicho esto, vamos a ver algunos consejos para pasear a tu perro con lluvia
Consejos para pasear a tu perro con lluvia
Los perros necesitan su paseo diario, haga el tiempo que haga. Por eso, aunque estemos ante días de lluvia y nos dé un poco más de pereza, no podemos dejar de sacarle (salvo recomendaciones oficiales por riesgo…). ¿Qué puedes hacer para pasear a tu perro con lluvia y que salga lo mejor posible? Aquí anotamos algunos consejos:
- Equipa a tu perro para que no se moje mucho. ¿Cómo? Podemos hacernos con chubasqueros o monos caninos. Si a tu perro le agobia llevar prendas, es mejor el chubasquero, que les cubre menos, son más ligeros y les da mayor libertad de movimientos. Eso sí, esto dependerá de la raza, pues hay perros de tamaños grandes y con densos pelajes que no necesitan cubrirse, ya tienen suficiente protección con su propio pelo.
En este sentido, es también relevante destacar que los perros con pelo espeso alcanzan su temperatura ideal entre los 10º y los 15º, mientras que los de perro corto lo hacen en torno a los 20º-25º. Algo que debemos tener en cuenta también a la hora de cubrirles o no. - Observa a tu mascota, él mismo y su comportamiento te dará pistas sobre si quiere o no salir, si le molesta más o menos la lluvia…
- Existen también botas para perros pero, en nuestra opinión, no nos convencen demasiado, pues no creemos que sean cómodas para ellos, salvo casos concretos como, por ejemplo, perros con heridas…
- En cualquier caso, al llegar a casa, es importante secarle bien con toallas de microfibra, empezando por las patas. La humedad en el cuerpo del perro no es buena, ya que puede derivar en problemas en la piel, heridas en las almohadillas de las patas, nudos en el pelaje…
- A la hora de pasear, intenta optar por zonas tranquilas, que estén más resguardadas. Además, haz paseos más cortos.
- En días de lluvia, no debemos bañar al perro, pues es demasiada humedad. Si ha venido muy sucio del paseo, se pueden emplear jabones en seco, como el champú de espuma seca Procare que tenemos en nuestra tienda.
- También debemos cepillar su cabello más a menudo para evitar nudos y eliminar la suciedad.
- Cuanto el perro se muestre un poco reacio o intranquilo en el paseo, podemos ‘premiarle’ a la vuelta del mismo con algún snack saludable, un rato de juegos y caricias…
¿Cómo actúan los perros ante la lluvia?
Aunque todo depende, como siempre, de cada peludito, por lo general, una cosa común a todos es que al llover y, en concreto, los días previos, los olores se intensifican, lo que puede afectar a su comportamiento. De hecho, en días de lluvia es habitual que estén más nerviosos e, incluso, que detecten la lluvia antes de que ocurra.
El ruido que provoca la lluvia fuerte también puede alterar a nuestras mascotas, que se sienten nerviosas e irritables. Es algo que debes tener en cuenta al pasear a tu perro con lluvia.
Como curiosidad, cuando hay lluvia, hay más humedad, descenden las temperaturas, y esto hace que las feromonas de las perras hembras se detectan mejor. Por eso, en los días de lluvia suele haber más apareamientos.
Importante es también conocer cómo puede afectar la lluvia y el exceso de humedad a su salud, ya que en estos días pueden intensificarse dolencias como dolores de huesos, músculos y articulaciones; también se pueden agravar problemas respiratorios y, de la misma forma que ocurre con las personas, su sistema inmunitario estará más debilitado.
¿Y qué pasa con las tormentas?
Los días de lluvia son una cosa, y los días de tormenta, otra. Y es que cuando la lluvia viene acompañada de truenos y relámpagos, nuestros peluditos suelen pasarlo un poco peor. Así, algunos consejos que podemos tener en cuenta son:
- No reñirle si se pone nervioso y alterado.
- Ofrecerle cariño pero sin sobreprotección, hay que seguir las rutinas normales, que el perro vea que estamos tranquilos y actuamos como si no pasara nada.
- Adapta para él un espacio seguro, donde haya menos ruido, y en el que esté su manta, un juguete, la comida…
- Intenta ocultar los ruidos con otros a los que esté acostumbrado, como música.
- En casos extremos, se pueden administrar tranquilizantes, siempre bajo el consejo del veterinario.
Esperemos que os resulten útiles estos consejos para sacar a tu perro con lluvia. ¡Nos vemos en el siguiente post!