La torsión de estómago en los perros es una patología muy peligrosa que en muchas ocasiones desemboca en el fallecimiento de la mascota en apenas unos minutos, y además es un final angustioso y doloroso para el animal. Por ello, debes poner todo tu empeño en que esto no suceda y, como siempre, la clave está en la prevención. Nuestros consejos pueden ayudarte en este sentido, así que apunta todo lo que te contamos en el post de hoy de Chuchupets, el tren de las mascotas.
Qué es la torsión de estómago en los perros
La torsión tiene lugar cuando el estómago se dilata, rota sobre sí mismo y estrangula todas las terminaciones venosas que riegan este órgano. ¿Y qué puede causar esta inflamación? Las razas con pecho hundido (la altura del tórax es superior a la anchura), como el bóxer o el braco de Weimar, o las que son de tamaño grande o gigante, como el dogo alemán, son propensas a sufrirlo, así que el factor genético es uno de los desencadentantes.
Ahora bien, lo más habitual es que se dé cuando un perro come mucha cantidad, en muy poco tiempo y justo después de haber practicado ejercicio. Esta es la situación que debemos evitar a toda costa si queremos prevenir la torsión. Y es que al comer y beber abundantemente y con prisas, el estómago se llena de gas y contenido alimentario, que es lo que provoca esta dilatación.
Qué síntomas tiene
Llegado el caso, notarías lo siguiente:
- Al perro le duele el abdomen porque se pone nervioso e incómodo, se levanta, se tumba, vuelve a levantarse y a mirarse a un lado y al otro de su cuerpo.
- A continuación, le dan arcadas e intenta vomitar pero no lo consigue.
- Con el paso de los minutos -pasa muy rápido- empieza a babear y se postra.
- Finalmente, ya podemos ver a simple vista que su estómago está inflamado.
Cómo actuar ante una torsión de estómago
¡No hay que perder ni un minuto! Incluso antes de notar la inflamación, es decir, cuando está nervioso e intenta vomitar y no puede, tienes que acudir de inmediato al veterinario. Lo mejor es que mientras te preparas para salir le vayas llamando para darle toda la información. Así, el veterinario te dirá cómo tienes que actuar y, además, podrá ir preparando el quirófano para cuando llegues. Ten en cuenta que aproximadamente el 85% de los perros lo superan, pero para ello hay que actuar con la mayor rapidez.
Prevenir la torsión de estómago
Como te decíamos, comer mucho, muy rápido y después de hacer ejercicio es la causa más habitual de la torsión de estómago. Así pues, lo que tiene que hacer tu perro después de hacer ejercicio es reposar; siempre tienes que ponerle la comida cuando esté tranquilo y descansado, no olvides esto.
Tampoco es aconsejable que salga a la calle a correr justo después de comer.
Además es conveniente que le repartas las tomas de comida (siempre alimentación para perros de la mejor calidad y con poca grasa) en al menos dos al día, porque si come cada 24 horas lo hará con mucha más hambre acumulada y ansiedad.
>> Lectura recomendada: ¿Cuántas veces al día tienen que comer los perros?
Por último, si tu perro es de raza gigante, también puedes plantearte hacerle, a modo de prevención, una operación quirúrgica que se llama gastroplexia preventiva y que se realiza con cirugía mínimamente invasiva (laparoscopia). Pregunta a tu veterinario sobre esta posibilidad.
No olvides tener presentes los consejos que te acabamos de ofrecer, te ayudarán a evitar esta fatídica situación.
¡Hasta el próximo post!