A algunos dueños les encanta que sus perros estén siempre relucientes, pero muchos no saben que no conviene darles más baños de lo aconsejado porque tienen algunas contraindicaciones. Además, son frecuentes las dudas como ‘cada cuánto tiempo tengo que bañar a mi perro’, ‘qué champú tengo que utilizar’ o ‘cómo lo seco’. Que no cunda el pánico, tenemos las respuestas. Desde Chuchupets, el tren de las mascotas, te damos hoy todos los detalles para bañar a tu perro.
Con qué frecuencia hay que bañar a los perros
En realidad no hay una respuesta concreta sino, más bien, lo que nos digan otros factores -como el estilo de vida- y el sentido común. Porque si salís en un día de lluvia y llega a casa lleno de barro o, peor, si se reboza en las caquitas de un amigo en el césped del parque… ¿Cómo no le vas a dar un baño? Aparte, también hay que distinguir entre razas, por ejemplo un Alaskan malamute necesita menos baños que un Pomerania.
Dicho esto, los expertos recomiendan que, en principio, los baños sean escasos, por lo que en principio bastaría con uno al mes. Y es que estos tienen algunos inconvenientes:
- En general no les gustan y les produce estrés
- Eliminan su capa de grasa protectora
- Si no usamos un champú adecuado podemos dañarles la piel (alergias, sequedad, sensibilidad)
- Y, sobre todo, porque en realidad no necesitan más.
Por supuesto, también tienen ventajas para tu mascota:
- Previenen enfermedades
- Sirven para prevenir la aparición de hongos
- Mantienen el pelo en buen estado, limpio y brillante
Así que baños sí, pero sin pasarse.
Pasos para bañar a un perro
Lo primero, tener a mano todo el material necesario, así no dejaremos al perro solo en el caso de que se nos olvide coger algo:
- Bañera, barreño, etc.
- Champú
- Secador
- Toalla
- Cepillo
Ahora sí, vamos a ver cómo se procede:
Importante: el champú debe ser específico para perros, como el champú fisiológico de Virbac que puedes encontrar en nuestra tienda, ya que los nuestros les pueden causar irritaciones y alergias porque tenemos un PH diferente. Además, también tenemos a tu disposición champús especiales pera perros con la piel seca, alérgicos, etc. Consulta con tu veterinario cuál es el más adecuado para tu mascota.
- Cepilla a tu perro para eliminar pelo muerto, desenredarlo, quitar el polvo, etc.
- Humedece todo su cuerpo con agua tibia, ni fría ni caliente; solo en verano se puede hacer con la manguera.
- Ahora ya puedes frotarlo con champú, empezando por la cabeza, intentando que no le entre agua en los oídos, y bajando hasta las patas. Limpia bien todas las partes de su cuerpo, hasta dejarlas bien enjabonadas.
- Aclara con agua abundante hasta que no quede nada de jabón adosado al pelo
- Utiliza un secador para secar bien el manto, aunque es un aparato que muchos perros aborrecen (¡ni te imaginas cómo se pone Regaliz en cuanto lo oye!). Si es el caso del tuyo, pasa el siguiente punto…
- Si el secador no funciona, vamos a secarle con una toalla frotando muy bien todo el cuerpo
- Para terminar, un buen cepillado para dejar a tu perrito reluciente y con el pelo suave.
Y un último consejo: intenta que tu perro asocie el baño como una actividad positiva. Acostúmbrale desde pequeño, hazlo en un ambiente agradable para él, anímale con palabras bonitas, hazle caricias y dale alguna chuche de paso ;). También le puedes sacar a la calle al finalizar para que termine de secarse y, así, sabrá que después del baño viene el paseo, que seguramente sea una de las cosas que más le gusta hacer.
¿Añadirías algún consejo más? ¿Cómo sueles bañar a tu perro? ¡Nos gustaría conocer tu opinión!
Más consejos en el blog de Chuchupets.